lunes, 8 de octubre de 2012

UN ATENTADO A NUESTROS BOLSILLOS. Martes 9 de Octubre.

La pasada semana el gobierno presentó la funesta propuesta de reforma fiscal en la que pretende obtener RD$55,000 millones para ajustar sus cuentas. Sin embargo, dicha propuesta refleja una alta carga de cinismo ya que atenta contra la sostenibilidad y competitividad de los sectores productivos, la clase media y el ahorro, a quienes se supone debe proteger. Como siempre, se pretende que el pueblo pague los platos rotos de una cultura gubernamental despilfarradora y corrupta.
    
Para una mejor edificación de este artículo, imaginemos el caso de Francisco, un empleado privado que labora para una empresa de intermediación financiera, devengando un sueldo de RD$45,000.00. De aprobarse tal cual fue presentada esta propuesta, de plano Francisco percibiría menos dinero por el nuevo “reajuste” del impuesto sobre la renta, que cada mes su empresa deduce de su sueldo. Así mismo, en diciembre, obtendría menos por concepto de la regalía pascual, ya que al gobierno “se le ocurrió” gravar el sueldo trece. Así mismo, como se propone aumentar el ISR a las empresas al 29%, tal medida desincentivaría a su empleador a bonificaciones esplendorosas. En el caso de que, Francisco trabaje, en una entidad de carácter cooperativista, que reparte dividendos a sus socios, también percibirá menos por esta vía, ya que el gobierno también desea su “tajada impositiva” por esta vía (10%). 
    
Como si esto fuera poco, el próximo año, en vez de pagar RD$1,200.00, por su Toyota Camry, del 2006, ahora resulta que eliminarán el sistema de marbete por un 1% del valor del mismo, en definitiva, más dinero para ellos y menos para Francisco. Como consecuencia de que el ITBIS sería aumentado a un 18% y que se ha establecido un nuevo sistema escalonado que afecta a productos anteriormente exentos, además de ampliar del 2.5% al 7.5% el Impuesto Selectivo al Consumo a las Cervezas, Francisco se ha dado cuenta que el dinero no le da y deberá ir menos a donde “El Boli”a beberse una fría con su par de quipes. Para colmo de males, se ha enterado que también sus ahorros serán gravados en un 10%.
    
Francisco ya sabe que salir a cenar fuera se convertirá en algo exclusivo para los ricos, por lo que ya está haciendo planes en casa. Sin embargo, ver un partido de pelota en la comodidad de su hogar, acompañado de un cervecita o un cuba libre con una rica dosis de chicharrones, será más caro ya que el cable será también gravado con un 10%, al igual que los chicharrones, donas, empanadas, quipes, etc….
    
Con todo este panorama, tal vez Francisco se plantee buscar un nuevo trabajo, algo difícil tomando en cuenta que la propuesta de reforma fiscal planea cobrar un 10% a los dividendos a las empresas de zona francas y de desarrollo fronterizo, aparte de un 5% a sus ventas locales, lo que se traducirá en una nueva oleada de despidos, que de sumarse al 29% a las empresas comerciales, desencadenará en mayor desempleo y no es bueno estar “inventando”
    
Lo indignante de todo esto, es que durante 7 meses, las autoridades económicas hayan negado la magnitud del déficit fiscal con fines proselitistas, y nos hayan vendido como una nación próspera, en pleno crecimiento y bonanza, con una economía “blindada”. Ahora resulta que somos un país pobre, tercermundista y prácticamente quebrado y que la única solución para salir de ese atolladero es su propuesta de reforma fiscal.
    
Lo peor es que no se hayan establecido responsabilidades a los autores de este despilfarro desenfrenado que nos ha llevado a esta dantesca situación, pues ni usted ni un servidor, la ocasionamos. Así también que tal desaguisado de reforma no haya establecido reducciones al gasto público, cuando se sabe que la nómina gubernamental es excesivamente abultada y que los gastos en infraestructura del 2012 están superinflados como consecuencia de un festival de inauguraciones meramente realizadas por fines políticos. 
    
No nos oponemos a una reforma fiscal, pero la misma debió ser más equitativa y justa, siempre protegiendo a los sectores más sensibles de la población y atacando de por sí el despilfarro y los gastos superfluos, además de establecer responsabilidades a quienes ocasionaron este enorme agujero, que supera con creces al hoyo de la quiebra de los bancos en el 2003. 
    
Nota: Mientras escribo mi columna, me entero que el gobierno alude como un error la publicación de gravámenes a la tripita, el chicharrón, el yun yun, etc…         “Se cae de la mata” que esto fue otra burda estrategia del gobierno para desviar la atención.

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