lunes, 30 de junio de 2014

GARANTIAS PARA LAS MIPYMES



Dos de los principales obstáculos que han tradicionalmente impedido el acceso al crédito a las MIPYMES son su informalidad financiera y la poca disponibilidad de garantías a ofrecer. Desde el comienzo del gobierno del Sr. Danilo Medina se han tomado una serie de medidas que han desembocado en el diseño de varios programas de apoyo a estas empresas, que vienen a satisfacer y cubrir sus necesidades financieras. No obstante un cabo que había quedado suelto dentro de estos esfuerzos era el tema de las garantías.

Pues recientemente, el gobierno ha concebido dos nuevas figuras bajo el amparo del ante-proyecto de ley del Sistema de Garantías Recíprocas. La primera de ellas serán las sociedades de garantía recíproca y la segunda las sociedades de reafianzamiento.

Las sociedades de garantías recíprocas tendrán por objeto dotar de garantías a las MIPYMES mediante la expedición a su favor de avales que le permitirán  acceso a financiamientos formales a mayores plazos, pero a menor costo.

Por su parte, las sociedades de reafianzamiento tendrán a su cargo reavalar a las sociedades de garantía recíproca asumiendo el riesgo de las garantías otorgadas.

Los avales emitidos por las sociedades de garantías recíprocas serán de tres tipos: 1- Garantías financieras para poder obtener créditos de entidades de intermediación financiera, operaciones de arrendamiento y hasta Factoring. 2- Garantías Comerciales para avalar operaciones entre empresas y 3- Garantías Técnicas para el cumplimiento de contratos de obras y contratos de suministros para poder así acceder a lo contemplado en la ley de compras y contrataciones públicas.

Estas entidades tendrán un capital que será aportado por personas físicas o jurídicas privadas, organismos internacionales y el Estado, a razón de socios protectores y a las MIPYMES se le requerirá una participación mínima para pasar a ser socios partícipes, para así adquirir los derechos de acceso al crédito. Los socios protectores de su lado no podrán exceder del 30% del capital de forma individual.

Desde el punto de vista normativo, quizás una de las partes más trascendentales conociendo la falta de institucionalidad de este país, se han contemplado normas prudenciales que aseguren su solvencia, nivel de endeudamiento, liquidez y su capacidad operativa, los cuales serán reglamentados por la Junta Monetaria  bajo la supervisión de la Superintendencia de Bancos.

Según las autoridades, la elaboración de este ante-proyecto se contó con la asistencia técnica de renombrados consultores internacionales, especialistas en el rubro, tomando en cuentas las mejores prácticas internacionales.

Me parece una estupenda idea la creación de estas dos figuras que vienen a complementar el esfuerzo realizado por las autoridades monetarias y financieras para poder desarrollar nuestras MIPYMES, sobre todo en un aspecto que representa una de sus principales debilidades, el otorgamiento de garantías formales.
Estas entidades ya operan desde hace tiempo en otras naciones como España, Chile, Perú y Argentina. Este modelo de Modelo de garantías recíprocas fue adoptado por España en los años setenta, y hasta el momento ha logrado apoyar a más de 70,000 pymes en el país ibérico.

También es importante a futuro la creación de otros mecanismos de financiación, como El Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF), una de las soluciones planteadas para mejorar la economía española y el empleo. Este sistema viene a contrarrestar la problemática del acceso a financiamiento por parte de las PYMES españolas, debido a que el grifo del crédito está aún cerrado por los bancos españoles los cuales se encuentran en un  profundo proceso de reestructuración y recapitalización.

El MARF es un mercado de renta fija para emisiones de deuda (bonos) por parte de empresas medianas. El objetivo del proyecto es facilitar el acceso de las empresas a los inversionistas de renta fija.

Con esta nueva legislación es deber del gobierno concientizar al gran empresariado a tomar participación en esta especie de mecenazgo financiero para que el programa funcione y no recargar al Estado con nuevos compromisos.

viernes, 20 de junio de 2014

Prioridades o Mundial de Fútbol

Recién inició la Copa Mundial de Fútbol Brazil 2014, el evento deportivo más esperado. Desde hace unos años, este evento es muy seguido por los dominicanos, a pesar de no ser nuestro deporte nacional. Pero ojo, a nivel de colegios, el fútbol ha ganado gran terreno, convirtiéndose  en el deporte principal de muchos de ellos.
   
Muy de niño, disfruté del Mundial de España en 1982 y me acuerdo de aquellas famosas imágenes de la celebración del gol del jugador italiano Marco Tardelli en la final contra Alemania. Pero sin dudas, el mundial que realmente posicionó al futbol en nuestro país fue el de México 86, el Mundial ganado por la Argentina del genial Diego Armando Maradona. También disfrutamos de otras figuras como Sócrates, Platini, Francescoli, Rumenigge, Butragueno, Laudrup, Papin, Rossi, etc.
   
Como muchos conocen, este Mundial 2014 se ha destacado por asuntos que no tienen nada que ver con el futbol, y son las constantes protestas de millones de brasileros que no están de acuerdo con la monstruosa cantidad de recursos que se han usado para la organización del mismo. El gobierno de Dilma Roussef, ha estado en tela de juicio, pues no ha logrado mantener los niveles de bienestar obtenidos por su antecesor y tutor Inacio Lula Da Silva. Incluso, ni siquiera hizo acto de presencia en la ceremonia inicial por temor a una pitada monumental.
   
Para nadie es ya un secreto que la FIFA ya no es una federación deportiva sino una poderosa empresa multinacional, bajo la batuta de su intransigente presidente Joseph Blatter. En tal razón, el Mundial del Futbol es una especie de franquicia que se vende al mejor postor. Eso sí, la FIFA se embolsilla el 95% de los ingresos que produzca el evento y le carga al país anfitrión los costos de infraestructura. Vaya negocio!!!.
   
Esta multinacional ha estado involucrada en muchos escándalos de corrupción, el más reciente las asignaciones de Rusia y Qatar, para los mundiales de 2018 y 2022 respectivamente, donde se sospecha que ha habido mucho dinero de por medio para que fueran elegidas “dedocráticamente”. Estos dos países, tienen unas condiciones territoriales y climatológicas adversas para el buen desempeño de un evento de esta magnitud, sin embargo ahora salen a relucir y se están buscando alternativas, que obviamente se debieron haber considerado antes. Se nota que también el fútbol, un deporte espectáculo, sufre las visitas de los “hombres del maletín”
   
Este Mundial de Brazil 2014 se le ha dado la etiqueta del más caro de todos los tiempos, costo que será pagado por la población más los turistas que lleguen, que serán víctimas de precios sobrevalorados. Se estima que los gastos en obras de infraestructura se acercan a los US$40,000 millones, más que los tres últimos tres mundiales juntos!!!.
   
La construcción de estadios ha sido la actividad más criticada, tanto por los sobrecostés, así como la tardanza en sus entregas. Muchos brasileños se quejan de la construcción del Arena Corinthians en Sao Paulo, donde se celebró el partido inaugural, ya que la ciudad ya contaba con un gran estadio disponible, el gran Morumbí. Así mismo se han construido gigantescos estadios en ciudades muy pequeñas donde lo más probable es que tras el mundial se conviertan en “elefantes blancos”.

En el mundial de Korea y Japón 2002, los estadios costaron US$4,500 millones. Por menos salieron los de Alemania 2006, que ya contaba con una gran infraestructura de fantásticos estadios, unos US$2,200 millones y los de Sudáfrica 2010 salieron por US$2,000 millones. En Brazil, un país de infinita y legendaria tradición futbolística, los doce estadios costaron US$7,700 millones y a eso hay que sumarle unos US$24,000 millones en hotelería y US$12,000 millones en aeropuertos y transportes.

Esto quiere decir, que cada estadio en promedio tuvo un costo de US$625 millones cuando en los últimos mundiales, este costo promedio no llegaba a la mitad. Pero para enardecer más a la población se expropiaron propiedades cerca de las principales vías de comunicación y fueron sacados de los alrededores de los estadios a muchos comerciantes para dar paso a las carpas de comercialización de la FIFA. Decía un reconocido comentarista de ESPN que los Mundiales deberían alternarse entre Estados Unidos y Alemania, países inmensamente ricos, con gran cantidad de buenos estadios, excelentes carreteras y múltiples aeropuertos.

La idea, aunque algo descabellada, se fundamenta en la necesidad de que cada país que opte a la organización de una Copa del Mundo sepa establecer cuáles son sus prioridades, pues las necesidades básicas de cualquier nación nunca deben anteponerse ante cualquier proyecto privado, por mucho que se piense pueda resaltarlo internacionalmente.

Pero mientras tanto, que ruede el balón!!!!!!!

lunes, 2 de junio de 2014

EL PARADIGMA DE LA RENTA VARIABLE


La República Dominicana ya cuenta con una bolsa de valores donde cualquier dominicano puede canalizar sus ahorros hacia interesantes instrumentos de renta fija. La atractivo de este mercado es que las rentabilidades obtenidas son mayores que la de los depósitos bancarios y el monto mínimo a invertir es muy bajo, unos RD$10,000.00, lo que rompe el paradigma de que invertir en bolsa es sólo para ricos. 

Nuestro mercado de valores está regulado y supervisado por la Superintendencia de Valores bajo la ley 19-00 del 8 de Mayo del 2000. Este mercado hoy en día moviliza miles de millones de pesos, con la participación de importantes puestos de bolsas, ya sea pertenecientes a un grupo bancario y puesto de bolsas independientes que en mi opinión, presentan productos más novedosos, tales como CCI Puesto en Bolsa o Alpha Valores.

Como sabemos, hasta ahora se comercializan instrumentos de renta fija, es decir productos donde los flujos de renta a generar se conocen previamente, o sea, que los desembolsos son regulares y constantes. Son más seguros, son más controlables y entre estos están los bonos gubernamentales, letras y los bonos corporativos. El inversionista de renta fija obtiene un rendimiento moderado pero el riesgo es mucho menor. Por esto muchas personas los prefieren, pues están orientados a beneficios a largo plazo.

Por el otro lado, los instrumentos de renta variable son aquellas inversiones donde no se puede saber de antemano el monto de los flujos de renta generados. La razón es que intervienen factores como el desempeño de la economía, el comportamiento del mercado y hasta los rumores. El instrumento de renta variable por antonomasia son las acciones de empresas. Obviamente estas pueden generar altísimas rentabilidades, pero a un riesgo mucho mayor. El inversionista aquí hace inversiones de corto plazo para ganar dinero extra todos los días.

En nuestra Bolsa de Valores aún no se comercializa con instrumentos de renta variable pues se entiende que nuestro tejido empresarial no está listo para este tipo de transacciones tan comunes en otros países. Para eso, deben cambiar muchas cosas, entre ellas la actual estructura tributaria que desmiembra financieramente a las empresas dominicanas y con esto romper el temor de muchos empresarios a presentar sus verdaderos estados financieros. Para poder cotizar en bolsa, la empresas deben presentar al ente regulador, toda su información financiera, que sería la materia prima de evaluación para obtener inversiones.

Esto es algo que el empresariado debería contemplar, pues sería una alternativa de financiamientos, menos costosa aún que la de los bancos. Ofrecer al público la venta de acciones puede ayudarles a realizar más proyectos a menor costo que generen mayor capacidad de creación de empleo. Es un paradigma que hay que romper, pues muchos entenderían que tal vez con tantos nuevos accionistas, podrían perder el control de la empresa. Pero pueden existir cláusulas de medidas de control y de gobierno corporativo que mengüen este temor.


Para el inversionista dominicano se le presentaría un formidable escenario para diversificar sus carteras de inversión con la compra de paquetes accionarios de sólidas empresas nacionales, lo cual incrementaría el flujo de efectivo nacional. También daría nuevas alternativas de inversión a los fondos de pensiones.

Pero para adentrarse a este mercado hay que tener muchas cosas en cuenta. Lo primero que es un mercado variable. Y si es así será por algo no?. Esta variación puede ser al alza o de repente a la baja, por ello como no se sabe cómo se moverán las acciones no se conoce la rentabilidad final. Con este sistema, se puede ganar muchísimo dinero si la empresa y su sector van bien, pero si va mal puede perderlo todo.

Un error que hay que tomar muy en cuenta es poner dinero que luego haga falta mañana. Sólo se debe invertir  con aquel dinero que no se vaya a necesitar a corto plazo. Es un problema de cultura financiera que tenemos los dominicanos de aventurarnos en inversiones arriesgadas usando dinero básico de nuestra subsistencia, tal como pasó con el tristemente célebre fraude de Telexfree.

Hay que tomar en cuenta que se puede ganar dinero de dos maneras. 1- Comprando acciones que su precio suban para luego venderlas (plusvalías) 2- Pago de dividendos por parte de la empresa. Pero hay que tener en cuenta que hay empresas que no pagan dividendos.

Invertir en la bolsa no es jugar la Loto, aquí RD$120 pesos no se traducirán en millones de pesos, por lo que no se debe caer en el error de la apuesta pues estaría basándose en algo no real. No hay remedios mágicos para hacerse millonario de la noche a la mañana. Invertir en bolsa requiere el análisis exhaustivo de mucha información. Es bueno buscar asesoramiento de profesionales serios, así como muy buenos libros sobre inversión. También las páginas webs de los organismos de regulación tienen vital información que se debe conocer e interpretar.

Una vez se ha decido ingresar a este interesante mundo es vital un seguimiento continuo al movimiento de las acciones, trazar una estrategia y actuar con férrea disciplina financiera. Para finalizar le dejamos una de las frases más célebres del gran inversor Warren Buffet : “Nunca inviertas en un negocio que no puedas entender”.