martes, 30 de julio de 2013

EL COOPERATIVISMO COMO ALTERNATIVA ANTE LA CRISIS MUNDIAL



Estamos viviendo tiempos difíciles. Las imprudencias cometidas por los grandes bancos norteamericanos a través del otorgamiento indiscriminado e irresponsable de créditos basura, su posterior titulación y venta a través del mundo, creando un efecto de contagio globalizado, explosionaron en la más devastadora crisis financiera que se conoce desde la Gran Depresión. Lo peor de todo, que aunque existen leves vestigios de mejora, los actores principales que ocasionaron esta debacle, aún poseen intacto su poder. Ante este hecho, nadie nos puede garantizar, que en el futuro, vuelvan a cometerse estos actos.


Sin embargo, un oasis sobre este desierto se erige como una solución alterna y es lo que mundialmente se conoce como la economía solidaria y al frente de esta, el Movimiento Cooperativista. Ya desde sus inicios esta corriente trascendió como una alternativa ante los embates de la revolución industrial.


Con un sistema financiero mundial donde el grifo del crédito se encuentra prácticamente constreñido debido a que los bancos se encuentran en una enredadera de cumplimientos de requerimientos de capital y difíciles procesos de reestructuración, el financiamiento por medio del sistema de la economía solidaria, ha tomado el testigo del crédito productivo. Nuestras cooperativas de ahorro y crédito, han establecido soluciones financieras a todos sus asociados, con un carácter solidario, que fomenta el sentimiento emprendedor de nuestra población más necesitada, que por su carácter informal, no pueden acceder a créditos en el sector bancario.


En países tan afectados por la crisis financiera como España, con una altísima tasa de desempleo, sus empresas cooperativas han realizado la hazaña de crear nuevas alternativas de trabajo. No por nada, el pasado 2012 fue declarado el Año Mundial de las Cooperativas, un reconocimiento mundial a los grandes aportes que realizan estas instituciones.


El movimiento cooperativista aglutina más de 1,000 millones de socios, creando más de 100 millones de empleos, según la ONU y ha ayudado a mejorar el nivel de vida de un alto porcentaje de la población mundial. Las 300 empresas más grandes del sector cooperativo ingresan más de US$1.3 trillones, lo que se convertirían por sí solas en la novena potencia económica mundial. 


Por otro lado, el 50% de la producción agrícola mundial se comercializa a través de cooperativas. Así mismo, las cooperativas de ahorros y crédito prestan servicios de calidad a casi 900 millones de personas, el 13% de la población mundial. En países tan desarrollados como Japón y Canadá, las cooperativas representan el 40% del volumen empresarial.

En Finlandia, el 75% de la población pertenece a una cooperativa. En Bélgica, si entras a una farmacia, lo más probable es que estés en una cooperativa. En Alemania, los bancos cooperativos tienen más de 16 millones de miembros. En Italia, el 50% de la agroindustria es gestionada por cooperativas.


Como ya habíamos mencionado, a pesar de la fuerte recesión económica, las cooperativas españolas siguen siendo una opción relevante a la hora de generar empleos de calidad y altamente estables. Por ejemplo, en el País Vasco se crearon en 2011, en medio de lo peor de la crisis, 150 nuevas cooperativas y el 13% de la población española vive en casas promovidas por cooperativas.


Es ese carácter de pertenencia que hace atractivas a estas instituciones, donde sus socios se sienten parte viva de la misma, y no un mísero número o código de cuenta. Además, los mismos participan en las actividades socio-culturales que constantemente se diseñan como parte del compromiso social que las caracteriza. Miles de operativos médicos, educativos, de vacunas y prevención de enfermedades son constantemente aportados por las mismas. Recientemente, las cooperativas, particularmente las del Cibao, se han convertido en un fuerte bastión de defensa de nuestros recursos naturales.


Como mencionara en su momento el comisario europeo para el empleo, el Sr. Laszlo Andor “Las cooperativas recuerdan a la comunidad internacional que es posible buscar la viabilidad económica y la responsabilidad social.”


El sector cooperativo dominicano, es cada vez más un sector de vasta fortaleza e influencia socio económica, que ha prestado servicios financieros a dominicanos de condiciones humildes con muy buenos resultados. Es una opción más que potable, que está soportada en hermosos valores y una filosofía solidaria muy definida. Sólo hay que adecuar sus leyes y normas con un sentido de modernidad que exigen los tiempos actuales, con un sistema regulatorio adecuado, pero que respete fielmente su naturaleza y carácter solidario

lunes, 22 de julio de 2013

¿EXISTE LA EXCELENCIA EN EL SERVICIO EN NUESTRO PAIS?



Cada vez que voy a un negocio, ya sea una tienda o un restaurante, siempre termino haciéndome la misma pregunta. La verdad que en nuestro país y básicamente en nuestra ciudad de Santiago, el servicio al cliente deja mucho que desear. Por lo menos, esa ha sido mi experiencia.

El pasado fin de semana concurrí con unos compañeros de la Maestría a un conocido restaurant en Los Jardines Metropolitanos especializado en pastas, donde la actitud de uno de los camareros fue totalmente deplorable. A mí personalmente me irritan los restaurantes donde uno se siente como si fuera un favor que se le está haciendo a sus dueños. Este elemento, con todos los gestos impresentables habidos y por haber, pareció molestarle una simple pregunta que hiciera uno de mis acompañantes, tan elemental como saber en qué tiempo podría estar la comida. Su respuesta, tan mal educada como infame, rompe con todos los estándares del servicio al cliente. Para colmo de males, tuvo el descaro de faltarle el respeto a otra compañera, cuando le exigió que se retractara. En ese momento, una de las dueñas, a quien conozco ligeramente, no se encontraba presente. Lamentablemente, muchos negocios, no cuentan con la correcta supervisión de sus propietarios, dejando que el personal actúe como “chivos sin ley”. Obviamente nos largamos de ese lugar, para no volver nunca más.

En una sociedad con una alta tasa de desempleo juvenil, da pena ver como estos jóvenes no cuidan en lo absoluto la oportunidad que le da la vida de desempeñar un trabajo honesto. Aquí es que siempre pienso en el espinoso tema de la problemática de la Educación. Si usted como individuo no ha recibido la dicha de una educación adecuada, luego no podrá desempeñarse eficientemente en sus puestos de trabajo. Soy de los que creo, que la aptitud de servicio debe fomentarse desde etapas tempranas, tanto en el seno familiar, como en escuelas o colegios. Esto tal vez, era lo que en mis tiempos de infante se conocía como Urbanidad. Luego, hay que desarrollar la actitud hacia el servicio, que debe brotar del mismo ser humano y afianzarse con un buen entrenamiento y capacitación permanente.

Parece ser, que sólo aquellas empresas, donde los dueños, generalmente un clan familiar, están constantemente presentes en el negocio, suelen entregar un buen servicio. Un ejemplo al que siempre recurro es el negocio De León Gomas, de mi gran amigo Sebi, sus padres y hermanos. Todos están integrados en el negocio familiar, y han impregnado al mismo una cultura se servicio al cliente fenomenal. Sus empleados, están perfectamente alineados a esta cultura, y el trato, además de agradable, es eficiente y personalizado. Da gusto ver a Don Sebastián, recibiéndote personalmente con una enorme sonrisa. Una empresa realmente exitosa, basada en una servicio de calidad.

Tengo que admitir que no siempre resulta así, pues me pasó una vez que fui a un bar donde el joven propietario estaba más preocupado por atender a sus amigotes, que a los demás clientes, a quienes trataba con indiferencia y desgano. No hay que ser un gurú en negocios, para saber que aquellos negocios que dependen de un grupo amigos, a quienes se les flexibiliza el crédito en demasía, termina irremediablemente cerrando sus puertas. Un servicio de primera, debe ser total.

Me parece que una de las causas del mal servicio en nuestra ciudad es la falta de inversión en capacitación y entrenamiento. Y el problema es ese, que muchos no lo ven como una inversión, sino como un gasto. Pero lo que ignoran, es el alto costo que tiene para su negocio, un personal malo y con poca o nula inclinación a ofrecer un buen servicio.

Es patético ver en algunos negocios, al personal malhumorado, con un truño insoportable, mal vestidos y sobre todo, que no dominen a la perfección los servicios o productos que el negocio ofrece. Peor aún, que sean respondones y maltraten al cliente, mandándoles generalmente a “freír espárragos”. No hay un evento que le haga más daño a un negocio, que un empleado, ya sea un camarero, un oficial de servicio al cliente o dependiente, que le falte el respeto a un cliente. 

Otra desconsideración que está muy aunada a un servicio deficiente, es el menosprecio al tiempo del cliente. Me pasa mucho con los médicos que dan consulta por ejemplo (no todos), que hacen esperar interminables horas a sus pacientes. A principios de este año, debí hacerme unos estudios médicos, y tomé un permiso en mi trabajo para salir temprano a entregar unos resultados al doctor en cuestión. Llegué a las 4:00 pm y me acabó recibiendo casi a las 10:00 de la noche. Seis horas, que pude haber invertido en actividades más productivas. Es inhumano hacer esperar tantas horas a alguien para sólo realizar algo tan trivial, como dar unos resultados de unos análisis. Lo peor, la actitud poco humana y vagabunda de la chica que funge como asistente, quien  atendió con menoscabo mis reclamos, dándole mayor importancia al chisme por teléfono y a su cuenta de facebook.

Si he de expresar todo el compendio de malas experiencias en cuanto a un mal servicio recibido, tendría material para una extensa enciclopedia. Sé que usted también mi querido lector. Es alarmante la mala calidad del servicio que se ofrece en muchos de nuestros establecimientos comerciales. Lo peor, es que muchos propietarios lo saben, y no toman las medidas de lugar. Irremediablemente, debemos reclamar nuestros derechos, pues parece que muchos olvidan el detalle de que, si me maltratas, no sólo no regresaré, sino que no te voy a recomendar con más nadie!!.

El paradigma de la recuperación económica mundial. Martes 16 de Julio

Ya hemos sobrepasado el ecuador de este año 2013. A nivel local, la fuerte contracción del comercio por efectos de la reforma fiscal ha propiciado una serie de medidas de política monetaria expansiva con el fin de estimular la demanda interna para tratar de reactivar la economía. Sin embargo, el panorama internacional presenta un escenario poco atractivo, y la tan mencionada recuperación económica, parece que tardará aún más de lo esperado.
  
 En su más reciente actualización realizada este mismo mes de Julio, el Fondo Monetario Internacional, ha reducido las perspectivas de crecimiento al 3.1%, prácticamente las mismas del año 2012.
   
Una de las principales razones es que las economías emergentes conocidas como los BRICS (Brasil, Rusia, China, India y Sudáfrica), ya no tienen ese horizonte tan favorable debido a la caída de la demanda de las economías desarrolladas. Como sabemos la profunda crisis financiera de la Zona Euro y los recortes presupuestarios en los Estados Unidos han hecho reducir sus niveles de importación de bienes y servicios.
   
Según el FMI, a los viejos riesgos aún persistentes, como el desaguisado bancario de la zona euro, se les une nuevos riesgos, como el enfriamiento de las economías emergentes por el debilitamiento de la demanda mundial y la paralización del flujo del crédito. La entidad entiende que se necesitan medidas adicionales para poder enderezar el rumbo desde el punto de vista de reformas macro-prudenciales.
   
Los Estados Unidos, por ejemplo, la primera potencia económica, crecerá 1.7% y no 1.9%, como se esperaba a principio de año. En el caso de China, que según algunos reportes, está al borde de la explosión de una burbuja inmobiliaria, deberá de hecho reducir  el crédito para evitar el sobrecalentamiento de su economía. En este sentido, el FMI estima que el gigante oriental crecerá este 2013 un 7.8%, el mismo nivel del 2012 y con perspectivas de seguir bajando para el 2014.
   
Brasil, nuestro gigante americano, en vez de crecer un 3% como se tenía previsto, sólo lo hará un 2.5%. El FMI entiende que el crecimiento del país carioca se ha topado con baches debido a limitaciones de mercado laboral y las infraestructuras.
   
Por otro lado, la Eurozona seguirá en el pozo de la recesión este año con una contracción del 0.6%. En el caso de nuestra Madre Patria, las perspectivas siguen siendo sombrías, a pesar de ciertas mejoras en el plano fiscal y exterior, pero no son aún lo suficientemente fuertes para dar un giro significativo. Incluso, según el FMI, España sería en el 2014 la única que no crecería.
   
Mientras tanto, Latinoamérica  y el Caribe, crecerán un 3%, menos de los previsto. Así mismo, las previsiones para el 2014 de crecimiento se ha reducido al 3.4%, cuando se estimaba un 3.9%. Obviamente las razones son las mismas, nuestros socios desarrollados, no están comprando nuestros productos por falta de demanda.
   
Sólo Japón se salva de este festival de reducción de perspectivas económicas, y se espera un crecimiento del 2%, debido al paquete de estímulos monetarios de su gobierno a través de un programa conocido como Abenomics.

Según el periódico El País “La Abenomics, es la estrategia del primer ministro Shinzo Abe para despertar el “espíritu animal” atrapado dentro de la economía japonesa, está acelerándose. Los estímulos fiscales y la flexibilización monetaria continúan, y avanza la tarea de desplegar una “estrategia de crecimiento” que promueva las reformas estructurales y reguladoras”
   
Como hemos podido comprobar, las nuevas estimaciones económicas a nivel mundial nos presentan un panorama todavía oscuro, a pesar de que existen ciertos indicios de recuperación. Sin embargo, la profundidad y complejidad de la crisis financiera en Europa, los problemas fiscales en Estados Unidos, así como el frenazo del fuerte crecimiento exhibido por las economías emergentes por la reducción de la demanda mundial, nos hace volver a replantear nuestras estrategias, y asimilar que aún queda mucho por hacer.

Incluso, en nuestro país, donde los mismos problemas están igualmente presentes: Desempleo, reducción de la demanda interna, paralización del comercio, aunado a graves problemas de corrupción y dejadez institucional, nos llevan al inexpugnable deber de exigir al gobierno medidas, aún más contundentes.

Brasil: Protestas y Fútbol

Brasil es un país hermoso pero lleno de contrastes. Es conocido mundialmente por su carnaval, sus playas, sus exóticas mujeres, el Amazonas, sus ritmos musicales, pero sobre todo por el fútbol. Este deporte es para los brasileños toda una religión.

Esta gran nación ha dado los mejores jugadores de fútbol: Garrincha, Pelé, Zico, Sócrates, Careca, Bebeto, Romario, Roberto Carlos, Rivaldo, Ronaldo (para un servidor, el mejor delantero centro de la historia), Ronaldinho, Kaká y recientemente su última estrella, Neymar. En Brasil se respira fútbol, los niños desde pequeños desean ser futbolistas, en parte por placer y por otra, para sacar a su familia de la pobreza.

 La gran mayoría de las estrellas anteriormente mencionadas provienen de estratos muy humildes. Como ellos millones de adolescentes se enrolan en las múltiples academias de los principales equipos como Flamengo (el más popular), Corinthians, Cruzeiro, Gremio de Porto Alegre, Sao Paulo, Vasco Da Gama, Fluminense, Santos (de donde salieron Pelé y Neymar), Botafogo, Internacional de Porto Alegre, Palmeiras, etc.., la idea: hacerse profesionales para lograr fama y fortuna. Recientemente finalizó la Copa Confederaciones, que fue como una especie de gran ensayo para el mundial del próximo año a celebrarse en tierras cariocas.

El país tiene un gran compromiso y sus organizadores han estado bajo mucha presión ya que existen todavía muchos cabos sueltos en términos de logística e infraestructura. Muchos de sus estadios no están al 100%, entre ellos, tal vez el estadio más famoso del mundo, el Maracaná. Según el célebre periodista mexicano Jacobo Zabludovsky, este estadio es la catedral del deporte mundial.

A pesar de los grandes logros obtenidos en los gobiernos de Lula Da Silva, donde millones de brasileños pudieron salir de la pobreza mediante grandes medidas de reestructuración socio-económica, el país adolece de serios problemas. El peor de ellos la corrupción rampante y rastrera que corroe a su sociedad. Todas las manifestaciones de expresión que existen en el país muestran una corrupción multinivel: en la policía, en los servicios públicos, en las empresas, en las instituciones, los contratistas, y sobretodo, en la clase política.

Los brasileños sienten la impotencia de vivir en un estado de impunidad, donde el dinero sucio lo soluciona todo, donde la tolerancia a la corrupción es ley. Brasil es la séptima potencia económica mundial, forma parte de las BRICS, las naciones emergentes que llevan la voz cantante en la economía mundial, y dentro de este tipo de países emergentes, es el más corrupto, sólo superado por China.

Según estadísticas de la Federación de Industrias de Sao Paulo, la corrupción cuesta al país cerca de US$40,000 millones lo que representa el 2.3% de toda su riqueza. Los dos gobiernos de Lula Da Silva, y el actual de Dilma Rousseff, se han visto lamentablemente salpicados por actos de corrupción por miembros de su propio partido.

La impunidad parlamentaria, exceso de secretismo, el clientelismo traducido en financiamientos a las campañas políticas a cambio de futuros favores y el desorden institucional son parte de las causas de este flagelo. ¡Pero el pueblo se hartó!. Y esta inconformidad se ha traducido en grandes manifestaciones públicas de protesta.

Tomando la Copa Confederaciones como plataforma, los indignados brasileros han tomado las calles aledañas a los grandes estadios para mostrar su desencanto y animadversión ante unas autoridades corruptas e impunes. Según algunos manifestantes entrevistados, en Brasil casi se tiene que sentir vergüenza por ser honesto.

Por eso es que saltarse las normas, la piratería, el soborno, el compadreo, el tráfico de influencia, saltarse el semáforo en rojo, meterse en vía contraria, poner música excesivamente alta, la chabacanería, parquearse en sitios prohibido resulta normal. El partido de semifinales entre Uruguay y Brasil, estuvo muy cerca de ser suspendido, pues la policía no podía garantizar la seguridad del estadio Mineirao, de Belo Horizonte, ante la gran la avalancha de manifestantes que se esperaba en los alrededores.

Obviamente, no somos partidarios de la violencia, entendemos que se pueden hacer grandes manifestaciones de repudio, de manera contundente, pero en paz. Las autoridades de la República Dominicana deben verse en el espejo de Brasil y tomar muy en cuenta las consecuencias que el flagelo de la corrupción puede tener sobre nuestra sociedad. Al igual que Brasil, adolecemos de serios problemas de corrupción e impunidad.

En distintos programas de televisión se muestra con lujo de detalles pruebas de explícitos actos de corrupción en casi todas nuestras instituciones, sin que esto motive a alguna autoridad a realizar algún tipo de investigación. Al igual que Brasil, pagar por favores, el compadreo, el clientelismo político, el tumbapolvismo, la chabacanería institucional, violar las señales de tránsito, la piratería, el irrespeto a la paz ajena, el macuteo, el amiguismo y los intereses particulares, el dinero sucio, la falta de criterio político son vistos como cosas normales, y quiénes no nos sometemos a ellas, no tenemos más remedio que sentirnos como bichos raros.

Lo que más me duele, como ciudadano de esta hermosa isla caribeña, es que nuestro pueblo permanece adormilado. Anestesiado por la impotencia, el hambre o el ostracismo intelectual. Pero cuidado, que como en Brasil, ese pueblo, ese gigante dormido, algún día puede despertar.