Recientemente el gobierno anunció la transformación del Banco Nacional
de la Vivienda y Fomento a la Producción (BNV) en el Banco de Desarrollo
de las Exportaciones (BANDEX), lo que me parece de por sí una muy buena
idea, ya que nuestra nación carece de una entidad financiera de segundo
piso que canalice recursos al desarrollo de los sectores productivos y
así incrementar la generación de empleos, tal como acontece en otras
naciones latinoamericanas.
Esta idea no es nueva, pues ya en
2006 funcionarios coreanos propusieron al entonces presidente Leonel
Fernández explorar la idea de transformar al BNV en una entidad más
eficiente orientada a fomentar el desarrollo de las exportaciones.
El
gobierno de Danilo Medina, el presidente “oficial de crédito” ha
retomado esta idea, sin estar tal vez en pleno conocimiento de que iba a
destapar una caja de pandora. El BNV nace en 1962 con la idea de ser el
órgano rector de las Asociaciones de Ahorros y Crédito.
Con la
promulgación de la Ley Monetaria y Financiera (183-02), esta institución
pasó a erigirse a la promoción de hipotecas y facilitación de
financiamientos a la producción, sustituyendo lo que conocíamos como
Departamento de Financiamiento de Proyectos del Banco Central
(DEFINPRO), antes FIDE o INFRATUR.
Pues resulta y viene a ser el
caso, que el BNV, politizado hasta la tambora, ha sido objeto de un
festín en el otorgamiento de crédito de muy baja calidad. Este banco
desde 2004, cuando se concretizó su conversión, ha suscitado un
deterioro alarmante de su cartera de crédito.
Para aquel
entonces su cartera vencida no sobrepasaba el 1% del patrimonio. Hoy en
día sobrepasa más del 10%!!!!!!. A julio del 2013, los préstamos morosos
representaban RD$18.00 por cada RD$100.00 en cartera, demostrando una
muy mala gestión de riesgo crediticio.
Para poner peor la cosa,
los ingresos operativos, desde 2011, no son suficientes para cubrir sus
gastos generales y administrativos. El aumento desmesurado de los
préstamos de muy dudosa recuperación sobrepasa ya los RD$800,
000,000.00, un verdadero escándalo que las autoridades de la
Superintendencia de Bancos deben explicar a la Opinión Pública. Días
atrás, la prensa se hizo eco que el BNV vendió a la Asociación La
Nacional de Ahorros y Crédito parte de su cartera con una pérdida de
RD$1, 242, 800,000.00, según la reciente auditoría realizada.
Esto
quiere decir, que esta venta se realizó con un descuento del 16.4%
debido al alto riesgo de incobrabilidad de dichos créditos. Qué
vergüenza!!. Este descuentazo se compone de dos partidas: 1- RD$494,
800,000.00 por descuento de venta de cartera y 2- RD$748, 000,000.00
por concepto de provisiones contra cartera mala. Qué desfachatez!!. Y
esto es sólo el principio pues restan aún RD$3, 000,000,000.00 por
venderse.
Para tener una idea de este desastre crediticio, según
sus estados financieros al 31-12-2013 la cartera vencida representaba
el 21% de la cartera total, cuando al 31-12-2012 era del 14.6%!!!.
Esto
daría vergüenza y provocaría la renuncia de cualquier consejo de
administración serio de una entidad de este tipo. Me uno a muchas voces
que exigen la publicación del listado de los deudores morosos del BNV y
que la SIB haga una exhaustiva investigación para determinar
responsabilidades y no como siempre ocurre, quieran ejercer el “borrón y
cuenta nueva”. Esta entidad, ha sido dirigida desde hace diez años por
políticos cercanos al Partido Reformista, y no por banqueros de verdad,
de raza y con los pies sobre la tierra.
Siempre he pensado que
la Política y la Banca no hacen buena liga. Ya en España pasaron una muy
mala experiencia, cuando las otrora Cajas de Ahorros, manejadas por
políticos, se fueron al garete, por su excesiva inclinación a dar
créditos locos y sin sentido.
Por el bien del Sistema Financiero
dominicano es fundamental que se investigue cómo fue posible tal
deterioro en la cartera de crédito del BNV, caiga quien caiga, pues ya
está bueno de tanta gente poco seria interponiendo sus intereses
personales sobre el bien común, en este caso los sectores productivos
del país, que tanto necesitan un banco de segundo piso que apoye sus
operaciones.
Todo parece indicar que como un botín, esta entidad
fue usada para favorecer a personas inescrupulosas y para asuntos
meramente politiqueros. Por eso es vital presentar un listado de esas
personas para que cumplan y devuelvan el dinero prestado.
Nunca
un proyecto de conversión del BNV al BANDEX será posible, mientras
coloquen bajo su dirección a politicuchos deleznables. Este proyecto,
necesario e interesante, debe caer en manos de profesionales
competentes, sin ambiciones de lucro y con un pleno deseo de aportar a
nuestros sectores productivos.
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